Exposición del Premio Nacional de Fotoperiodismo 2015

PALACIO QUINTANAR, el centro de innovación para el diseño y la cultura de la Junta de Castilla y León, presenta la selección de fotografías del Premio Nacional de Fotoperiodismo 2015 «de fotógrafos para fotógrafos», convocado por la Asociación Nacional de Informadores Gráficos de Prensa y Televisión (ANIGP-TV).

41 imágenes componen el recorrido visual de esta exposición en la que están presentes las obras ganadoras y seleccionadas este año en el Premio Nacional de Fotoperiodismo, el Premio Enrique Meneses y el Premio Félix Ordoñez.

Obras destacadas

‘La valla’, de Santiago Palacios, es la ganadora del Premio Nacional de Fotoperiodismo 2015. Registra una escena en la que un grupo de emigrantes subsaharianos piden auxilio desde lo alto de la triple valla metálica que divide Marruecos y Melilla.

En segundo lugar, y también ganadora del Premio Enrique Meneses, ‘Crisis Nacional de la Vivienda’, de Andrés Kudacki. En ella vemos el desahucio Carmen Martínez Ayuso, de 85 años, de su casa en Madrid.

En tercer lugar, ‘Colgado de un sueño’, de Jesús Blasco de Avellaneda, que captura el último gran salto en la frontera de Marruecos y Melilla, realizado el 28 de mayo de 2015, en la que más de 500 subsaharianos lograron cruzar la valla que separa ambos territorios.

Así también, y con la mención de honor, ‘Gaza bajo el fuego’, en la que Maysun Abu-Khdeir inmortaliza la tristeza de los familiares de 4 niños palestinos que lloran por su entierro.

En cuanto al Premio Félix Ordoñez, de temática deportiva y cultural, el ganador de este año es Gonzalo Arroyo con ‘Procesión de la Virgen del Carmen en Tenerife’. En ella, los mozos de la Hermandad del Gran Poder de Dios Bajan la imagen de Nuestra Señora la Virgen del Carmen después de la procesión en Barcas en los muelles del Puerto de la Cruz, en la isla canaria de Tenerife.

Todas estas fotografías ponen de manifiesto la dedicación y el trabajo que los profesionales de las distintas áreas de la información realizan día a día siendo testigos directos de la realidad en sus diversas facetas; desde las más livianas y fáciles de soportar, a las más duras y complejas.